El dueño "pasa" de recoger su coche del taller y el mecánico le cobra por cada día que no va

Taller mecánico
Taller mecánico

En ocasiones, algunos clientes dejan su coche en el taller y no lo recogen, lo que puede generar una situación complicada. Las razones para esto varían: algunos no disponen del dinero necesario para pagar la reparación, otros simplemente no quieren recoger el coche y, en algunos casos, se les olvida. Sin embargo, los talleres tienen herramientas legales para evitar que los vehículos queden abandonados en sus instalaciones sin que el propietario los retire. El caso que se relata hoy ocurrió en GT Automoción, el taller de Ángel Gaitán, pero es un abogado quien nos explica cómo los mecánicos pueden obligar legalmente a los clientes a recoger sus vehículos.

En este caso en particular, el coche ha permanecido en el taller de Gaitán durante más de dos semanas sin que su dueño se haya presentado para recogerlo, e incluso parece que se niega a hacerlo para evitar pagar la factura. Este tipo de situación representa un desafío significativo, especialmente para los talleres más pequeños. Mantener un coche en sus instalaciones durante un largo periodo de tiempo supone un coste adicional, pero afortunadamente, la ley proporciona una solución para estos casos, que no resulta económica para el propietario del vehículo.

Según la normativa vigente, una vez que el taller avisa formalmente al cliente de que el vehículo está reparado y listo para ser retirado, el propietario tiene un plazo de tres días hábiles para recogerlo. Si este plazo se supera, el taller tiene derecho a cobrar al cliente por lo que se conoce como "gastos de estancia" o "gastos de pupilaje", tal como explica el abogado Xavi Abat en un video compartido en redes sociales. Este derecho está recogido en el Real Decreto 1457/1986, que regula la actividad de los talleres de reparación de vehículos y permite al taller cobrar por cada día adicional que el coche permanezca bajo su custodia.

El decreto especifica que los gastos de estancia pueden comenzar a generarse una vez que el presupuesto ha sido aceptado o la reparación ha sido completada y notificada al cliente. Si el cliente no retira el vehículo dentro del plazo de tres días, el taller puede cobrar por cada día adicional que el coche permanezca en el taller, siempre que el vehículo esté bajo la custodia de las instalaciones del taller.

Para resolver este caso concreto de la manera más adecuada, Ángel Gaitán ha decidido enviar un burofax al cliente, una medida formal que no solo le informa de que el coche está listo para ser retirado, sino que también protege al taller en caso de que la situación se prolongue. Mantener un coche en las instalaciones del taller representa un coste y ocupa espacio que podría estar destinado a otros vehículos.

Este problema es especialmente delicado para los talleres pequeños, que suelen tener un espacio limitado. En muchas ocasiones, los vehículos reparados permanecen en el taller porque los propietarios no quieren o no pueden recogerlos, lo que genera un verdadero quebradero de cabeza para el taller, ya que esos vehículos ocupan un espacio vital para su funcionamiento, especialmente en zonas urbanas donde el aparcamiento es escaso.

En resumen, los talleres tienen herramientas legales para hacer frente a este tipo de situaciones y cobrar por el tiempo adicional que los vehículos pasen en sus instalaciones. Los propietarios de coches deben estar al tanto de estas normativas para evitar sorpresas desagradables y posibles costes adicionales.