Un joven de 23 años ha sido investigado por la Guardia Civil de Segovia por circular a 264 km/h por la Autovía A-601 (Segovia-Valladolid), cerca de la localidad de Cuéllar. La temeraria hazaña, que quedó registrada en un vídeo publicado en redes sociales, ha conmocionado a la comunidad y ha puesto de relieve la gravedad de las conductas imprudentes al volante.
El vídeo, que rápidamente se viralizó, mostraba al joven conduciendo un turismo de alta gama a una velocidad más de dos veces superior al límite permitido. Las imágenes alertaron al Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico de la Guardia Civil de Segovia, quienes iniciaron una investigación para identificar al conductor y al vehículo.
Las pesquisas policiales no tardaron en dar sus frutos. Se logró identificar al conductor, un joven de 23 años que, para más infracción, carecía de cualquier tipo de permiso de conducir. Además, se verificó que el vehículo utilizado pertenecía al padre del conductor, quien también fue investigado como "cooperador necesario" en el delito de su hijo.
Los hechos denunciados constituyen un flagrante delito contra la seguridad vial. Conducir a una velocidad tan excesiva pone en grave riesgo la vida del conductor y del resto de usuarios de la vía. Además, hacerlo sin carnet multiplica exponencialmente el peligro, ya que el conductor no posee la formación ni las habilidades necesarias para controlar el vehículo en caso de imprevisto.
La investigación sigue su curso, y se espera que en las próximas semanas se dicten las medidas oportunas contra el conductor y su padre. Este caso sirve como triste recordatorio de la importancia de respetar las normas de tráfico y de no conducir nunca bajo los efectos del alcohol, las drogas o con exceso de velocidad.
La seguridad vial es responsabilidad de todos. Debemos conducir con prudencia y responsabilidad, y ser conscientes de las graves consecuencias que pueden tener nuestras acciones al volante. Una vida vale más que cualquier prisa o imprudencia.
