BMW

Un compra-venta se entera de que está vendiendo un BMW M4 con un bastidor de otro coche

Ningún componente del coche presentaba datos coherentes
El M4
El M4

Ponía que era un BMW M4 Competition, pero la sorpresa fue mayúscula cuando empezaron a indagar en la historia que rodeaba a este coche alemán que tantos vicios ocultos escondía bajo el capó. Estamos acostumbrados a esas historias de coches con más kilómetros de los que refleja en su cuentakilómetros, de delincuentes que se dedican a recortar todo lo que tengan que recortar para hacer negocio y vender los coches más caros. Pero la historia de este BMW M4 es mucho más rocambolesca de lo que le gustaría incluso al propio compra-venta que lo vendió, recuperó para volver a intentar vender.

Como decíamos al principio del artículo, ponía que era un BMW M4 Competition, pero bastaba con indagar un poco para darse cuenta de que en realidad habían realizado todo tipo de tropelías para intentar sacar más dinero a lo que en origen parecía ser un M4 normal. Decimos “parecía” porque cuanto más se indaga en este coche más dudas surgen sobre cuál es su origen exacto, porque ni el bastidor coincide con lo que realmente es.

Este coche lleva dos años dando vueltas por España. Estuvo en las manos de un compra-venta que lo consiguió colocar, pero por algunos problemas y para evitar que el mal fuera a más, este establecimiento recompró el coche. Fue entonces cuando empezaron a indagar en el interior del vehículo y en los componentes del mismo para intentar ver qué pasaba con este polémico M4 que tantos dolores de cabeza estaba dando al establecimiento que lo puso a la venta.

Bastaba con hacer unas comprobaciones iniciales para demostrar que había cosas que no cuadraban. No coincidía, por ejemplo, la fecha de fabricación con la de la pintura. Cuando se introducían los datos en BMW se podía ver perfectamente cómo decían que el cambio era automático, pero al mirar la palanca del coche incita se veía que era manual. Pero lo más peculiar fue cuando se dieron cuenta de que el número de bastidor no pertenecía realmente a este coche.

Con unas pequeñas indagaciones se pudo comprobar que lo que habían hecho realmente fue coger el número de bastidor de un BMW M4 para colocárselo a un M4 Competition. Vamos, que utilizaron el bastidor de otro coche para “rebautizar” a uno completamente distinto sin hilar demasiado todos los detalles.

La pregunta es obligada: ¿Qué debe hacer un compra-venta que recibe un coche de estas características? Muchos directamente intentarían colocarlo y quitárselo de encima, pero lo cierto es que éste ha reconocido lo que tienen y ahora la responsabilidad es suya. Al menos lo es de cara a la idea de ponerlo a la venta. El origen de este coche es un misterio, pues cuando se indaga en el mismo solo se llega al otro M4 al que le han robado el bastidor para dárselo a éste.

Este tipo de estafas también se ven en coches de alta gama. Hablamos de un coche que en el mercado de segunda mano parte de un coste de los 80.000 euros, con lo que poca broma. Ahora bien, la diferencia entre el M4 normal y el Competition de este mismo año puede ser de incluso 30.000 euros más, aunque todo depende de la unidad, de los kilómetros y de algunas cuestiones más específicas.