Fabricantes

Ángel Gaitán explota contra el grupo Stellantis: "Vamos a ir a por vosotros"

Ángel Gaitán en su taller junto al Jeep Wrangler

Ángel Gaitán, uno de los mecánicos más influyentes del mundo del motor en España, ha vuelto a captar la atención del sector con una nueva denuncia. Esta vez, su crítica se dirige directamente al grupo Stellantis, que comercializa marcas como Jeep, Fiat, Citroën, Lancia y Maserati. Gaitán, conocido por no guardarse nada y decir las cosas tal como son, narró la odisea que vivió intentando reparar un Jeep Wrangler que llegó a su taller con graves problemas.

El vehículo, un Jeep Wrangler con apenas dos años de antigüedad, presentaba un fallo en el sistema AdBlue, encargado de reducir las emisiones contaminantes. "Si pillo al sinvergüenza que ha diseñado este depósito de AdBlue, lo reviento", exclamó un frustrado Gaitán durante uno de sus vídeos. Habían logrado destaponar el depósito, pero el problema estaba lejos de resolverse: "Sale el líquido, pero no hay presión", explicó.

Una cadena de problemas: motor roto y AdBlue fallido

La historia comenzó cuando el propietario del Jeep sufrió una avería grave: el motor del coche se rompió, y según Gaitán, el vehículo "casi sale ardiendo". El cliente había cumplido con todos los mantenimientos recomendados por la marca, pero una vez fuera de garantía, se encontró sin apoyo por parte de Jeep. "Reventar el motor y que luego pasen de ti, es desesperante", comentó el mecánico.

Después de meses de espera, el taller de Gaitán consiguió que Jeep enviara un motor de reemplazo, tras exponer públicamente la situación a través de redes sociales. "Un año después de pedir el motor y de hacer 200.000 vídeos sacando las vergüenzas a Jeep, finalmente llega el motor", relató. Sin embargo, al instalarlo, comenzaron nuevos problemas: faltaban piezas y, para colmo, el coche no podía pasar la ITV debido a un fallo en el sistema AdBlue.

Un sistema defectuoso y una atención al cliente ineficiente

El sistema AdBlue, que en teoría debería ayudar a reducir las emisiones contaminantes, seguía sin funcionar. "La bomba está averiada y cuando intentamos codificar los inyectores, la centralita no los reconoce", explicó Gaitán, visiblemente molesto. Según él, la situación era desesperante, no solo por la cantidad de tiempo perdido, sino también por el dinero gastado por el cliente en reparaciones y llamadas a atención al cliente, sin recibir respuestas satisfactorias.

El propio Gaitán reveló el alto coste del depósito de AdBlue, que asciende a casi 4.000 euros, sin incluir la mano de obra. Y para empeorar las cosas, ni siquiera hay repuestos disponibles. "Sabéis lo más gracioso", añadió, "tampoco hay depósitos en stock". Así, el propietario del Jeep estaba a punto de cumplir cuatro años con el coche, pagando su seguro y sin poder utilizarlo.

Una llamada a la acción: Gaitán prepara una demanda contra Stellantis

Ante la falta de soluciones, Gaitán anunció que tanto él como sus colegas de la Escuela Nacional de Peritos estaban preparando una denuncia contra Stellantis. "Vamos a ir a por vosotros", advirtió, acusando al grupo automovilístico de "destrozar familias" por su falta de atención y recambios. Según Gaitán, muchos clientes afectados están sufriendo incluso problemas psicológicos debido a la situación: tienen deudas por coches que no pueden utilizar, seguros que siguen pagando, y deben alquilar vehículos o comprar otros de segunda mano para poder moverse.

Gaitán lanzó un mensaje claro a los directivos de Stellantis: "No sé cómo podéis dormir tranquilos cuando estáis arruinando la vida de tantas personas". Y es que, según el mecánico, aunque logren reparar los vehículos, muchos clientes siguen sin poder pasar la ITV debido a los fallos en el sistema anticontaminación, lo que les impide circular legalmente.

El mecánico concluyó su denuncia con una advertencia: "Esto es una auténtica vergüenza y se tiene que saber". Con estas duras palabras, Ángel Gaitán sigue haciendo ruido en el sector automotriz, señalando las fallas que afectan a miles de conductores, en este caso, usuarios de Jeep y otras marcas del grupo Stellantis.