Los híbridos enchufables contaminan un 37% menos que un gasolina

híbrido enchufable

Los coches híbridos enchufables se están posicionando como la opción más eficiente para los tiempos actuales, al combinar las ventajas de los vehículos eléctricos y los de combustión. Estos automóviles permiten realizar la mayoría de los desplazamientos diarios en modo 100% eléctrico, sin generar emisiones y contribuyendo a mejorar la calidad del aire en las ciudades. Además, se benefician de la Etiqueta Cero Emisiones de la DGT. Para los viajes más largos, cuentan con un motor de combustión que les otorga una mayor autonomía, asegurando que no haya limitaciones durante los trayectos.

Arval ha lanzado el libro blanco titulado "Todo lo que debes saber sobre los híbridos enchufables (PHEV)", un estudio detallado que analiza las ventajas y desafíos de esta tecnología, proporcionando recomendaciones sobre cómo aprovechar al máximo su potencial.

1. Hasta un 37% menos de emisiones de CO2

Los PHEV emiten hasta un 37% menos de CO2 en su ciclo de vida en comparación con los vehículos de gasolina. Aunque producir un coche híbrido enchufable requiere más recursos debido a la batería, las menores emisiones que generan durante su uso les permiten compensar esa diferencia. Según el estudio, un Peugeot E-308 emite 24,8 toneladas de CO2 a lo largo de su vida, frente a las 29,5 toneladas del modelo híbrido enchufable y las 46,8 toneladas del equivalente en gasolina.

2. Consumo real superior a las estimaciones WLTP

En la vida real, los híbridos enchufables consumen más de lo que sugiere el ciclo WLTP. Un estudio de Arval basado en 1.000 coches reveló que estos vehículos consumen de media 6,4l/100km, un 279% más que lo estimado por WLTP. La razón es que el porcentaje de conducción eléctrica en el mundo real es mucho menor que el estimado en las pruebas, con cifras que oscilan entre el 45-49% para coches particulares y el 11-15% en vehículos de empresa.

3. Nuevas normativas duplicarán los consumos homologados

La nueva normativa Euro 6E afectará las emisiones homologadas de los PHEV. En algunos casos, como el del BMW X1 xDrive25e, las emisiones pasarán de 45 g/km a 96 g/km, lo que aumentará el consumo y reducirá su eficiencia energética.

4. Autonomía eléctrica en aumento

En los últimos 14 años, la autonomía eléctrica de los PHEV ha aumentado significativamente, pasando de 30 km en 2010 a 120 km en 2024. Este crecimiento ha sido uno de los factores clave en el aumento de las ventas, y se espera que las futuras mejoras se centren en recargas rápidas.

5. Vehículos más pesados

Los PHEV son un 45-50% más pesados que los vehículos de combustión tradicionales, lo que se debe a la incorporación de un motor de combustión, un motor eléctrico y baterías. Este peso adicional es un factor a tener en cuenta en su rendimiento y consumo.

6. Coste superior

Los PHEV son, en promedio, 35% más caros que los vehículos de combustión interna y un 9% más que los eléctricos puros. Esto representa un desafío a la hora de comparar su TCO (Coste Total de Propiedad) con otras opciones.

7. TCO competitivo

A pesar de su mayor precio, los PHEV ofrecen un TCO competitivo, situándose por debajo de los coches diésel y gasolina y solo superados por los vehículos eléctricos. Esto los convierte en una opción atractiva para quienes buscan una combinación de eficiencia y ahorro a largo plazo.

8. Crecimiento constante

La tecnología PHEV sigue ganando terreno en el mercado, representando el 8,6% de las matriculaciones en la UE en 2023, con más de 1,17 millones de unidades vendidas. Además, el 43% de las empresas europeas ya están considerando incluir PHEV en sus flotas.

9. Recargas frecuentes: clave para su eficiencia

Para maximizar la eficiencia de un PHEV, es crucial recargarlo con frecuencia. Según el estudio de Arval, los conductores que recargan su coche 24 veces al mes logran consumos de 3,4l/100km, mientras que aquellos que lo recargan solo 8 veces al mes consumen en promedio 6,4l/100km.

10. Recomendaciones para gestores de flotas

Para obtener el máximo rendimiento de los PHEV, los gestores de flotas deben analizar el perfil de conducción de los usuarios, fomentar la recarga frecuente y desarrollar infraestructuras de carga adecuadas. La telemetría, la formación y las políticas de incentivos también son esenciales para maximizar los beneficios de estos vehículos.

En conclusión, los PHEV representan una opción viable y cada vez más popular, pero requieren una gestión eficiente y un uso consciente para aprovechar al máximo su potencial en términos de ahorro y sostenibilidad.